¿Qué decir a familiares
y "amigos" críticos y negativos con nuestra elección de practicar el Homeschooling,
Unschooling, o nuestra forma de crianza?
Hay personas que optan por darles información: libros, cds,
webs… y les dicen que una vez lo hayan leído y se hayan informado bien,
entonces podrán entender y opinar mejor.
Algo que solía decir Sandra Dodd cuando sus hijos eran
pequeños (ahora los 3 ya tienen más de veinte años): “El día que esto
(unschooling en su caso) deje de funcionar los llevaremos a la escuela”. Se ve
que les funcionó ya que ninguno fue nunca al colegio. Supongo que al decir esto
les (a los familiares) queda la esperanza de que, quizás, algún día sí vayan al
cole. Yo no utilizo esta frase pero me parece acertada en depende que casos o
con quien se esté hablando.
Cuando me siento muy cuestionada y me preguntan: “¿Por qué no
llevas tus hijos al cole? Les suelo decir: ¿Y tu por qué los llevas? O cuando
nos preguntan: ¿Por qué no coméis carne? Les digo: ¿Y vosotros por qué la
coméis? No suelo contestar así sin más pero a veces pienso que es bueno hacer
ver a la gente que tú sí tienes tus razones para hacer algo distinto. Lo has
elegido. Algunos se quedan dudando y mudos por que en realidad nunca se lo
habían planteado. De hecho no han escogido entre varias opciones la que más les
va o la que consideran mejor sino que lo hacen por costumbre, por inercia, por
que lo hace todo el mundo… sin pensarlo detenidamente.
Mucha gente necesita pensar que ellos no fueron a la escuela
por nada… Nosotros les hacemos tener que revisar sus propias infancias y
cuestionarse lo que ellos hacen o dejan de hacer. Y, precisamente, eso es lo
que muchos no quieren ni necesitan hacer.
Defendernos y justificarnos y dar explicaciones del por qué
hemos escogido este camino y no otro les da más poder para poder opinar sobre
lo que hacemos. Al darles tantas explicaciones se sienten con el derecho y la
libertad de opinar sobre lo que les estamos diciendo y es cuando opinan, juzgan, critican… Si lo miramos bien,
somos nosotros, con nuestros argumentos, los que les damos ese poder de
participación. Son ellos los que se sienten incomodos con nuestra decisión y
piensan que es nuestra obligación darles explicaciones. Nuestra obligación no
tiene nada que ver con educar a los que dudan de lo que hacemos. Repito, podemos darles
información: libros, cds, webs, blogs… y dejarles escoger que quieren hacer con
ella.
Muchos familiares o “amigos” quizás no muestren ni el más
mínimo interés por lo que hacemos los unschoolers o homeschoolers. No quieren
ni oír hablar del tema… Piensan que solo la escuela puede dar al niño lo que
necesita. Pero, ¿qué pasa cuando la escuela fracasa o cuando el niño no hace o
no es como los demás esperan que sea?
Desafortunadamente, mucha gente tiene un concepto erróneo de
cómo aprendemos realmente. Cuando digo aprender no me refiero a estudiar y
memorizar para pasar exámenes si no a aprender con pasión, con interés, con
motivación lo que a uno realmente le gusta, apasiona o necesita.
Aquí os dejo estos artículos míos sobre aprendizaje autónomo
para los que queráis leer más y tengáis tiempo (es una recopilación de algunos
de los artículos publicados en este blog):
Los sentimientos que surgen cuando nos cuestionan lo que
hemos escogido hacer pueden interferir mucho en como les respondemos. Y también
nos traen muchos problemas, ¿verdad? Es como si aun necesitásemos que dejaran
de pensar mal de nosotros. Entonces es cuando surge esa necesidad de sentirnos
comprendidos, aceptados, queridos… como cuando éramos niños ¿recordáis?
Entonces es cuando damos todas esas explicaciones y nos justificamos con la
esperanza de que dejen de juzgarnos y nos acepten tal y como somos y no cómo
ellos quieren que seamos.
Si somos capaces de dejar fluir, “soltar”, las emociones que
nos invaden al ser cuestionados (escuchar nuestra mente pero no creer todo lo
que nos dice y sobre todo no reaccionar) entonces pierden el poder sobre
nosotros y podemos empatizar (comprender) mejor a la persona dudosa y negativa.
Podremos entender que sus miedos son debido a que piensa que nuestros hijos no
van a aprender, o si aprenden, quizás no tanto como en el cole. Tienen miedo de
que no sepan adaptarse a la “sociedad”… Es más útil validar (comprender y
aceptar) eso que sienten que intentar cambiarlo. Unos ejemplos de como
podríamos validar todos esos miedos: “Ya veo, piensas que no va a aprender.
Tiene que ser duro y difícil para ti pensar eso y aceptar que no van al cole.”
“Piensas que en el cole estarían mejor, ¿verdad?” “Tienes dudas de si en un
futuro sabrán todo lo necesario”. “Tiene que ser difícil sentirse así”. “Lo
entiendo y lo siento”. Seguro que se os ocurren muchas más formas de validar lo
que sienten vuestros amigos y familiares. En vez de enfadarnos con ellos
podríamos utilizar las mismas herramientas que utilizamos con nuestros hijos a
la hora de validar sus sentimientos, emociones, acciones… No olvidemos nunca
que detrás de toda actitud hay un motivo valido. Aun que no sepamos cuál o no
nos guste.
Si aceptamos que sus emociones, reacciones, pensamientos… no
son algo que nosotros debamos controlar ni cambiar nos sentiremos en paz con
nosotros mismos. Podemos estar en paz haciendo lo que nosotros pensamos que es
lo mejor y más correcto. Podemos dar información para que los demás hagan lo
que quieran con ella, sin esperar que nadie cambie. Ellos están donde están por
una razón y nosotros estamos donde estamos por otra razón. Podemos darles
información para que cambien pero no es nuestro deber cambiar a nadie. Es una
decisión enteramente de ellos el escoger quedarse donde están o buscar lo que
necesitan para llegar a un nuevo lugar. No todo el mundo quiere o necesita
cambiar y mejorar. Hay quienes están bien a gusto en un mismo sitio toda su
vida sin moverse.
¿Qué respondemos cuando nos preguntan si somos sus profes o
si les damos clases o si seguimos el mismo currículo escolar? Hay quienes dicen
sí y lo dejan estar. Hay quienes se hacen los locos y no contestan. No tenemos
por qué tener la necesidad de que otros entiendan y aprueben lo que hacemos.
Ellos no saben ni se han cuestionado nunca que hacer de profes o darles clases
sin que ellos (nuestros hijos) hayan mostrado interés primero por algo es
precisamente lo que no hacemos y que pensamos y sabemos que esa actitud va en
detrimento de su aprendizaje real y natural. Cuando hacen esa pregunta en
realidad solo quieren estar seguros de que el niño recibe todo lo que necesita.
Aun que lo que el niño verdaderamente necesita no es lo que ellos están
acostumbrados a pensar. Dejarles ser no está socialmente aceptado aun.
Para terminar os quiero hacer una pequeña confesión. Sabéis
cómo solucionamos, hace ya algún tiempo, unos problemas con unos parientes
relacionados con el trato poco respetuoso hacia nuestros hijos y el tema de la
alimentación sana. Les envié un largo mail a cada una explicando lo que no nos
gustaba, el por qué y como nos gustaría que todo fuese. También me disculpe por
discusiones anteriores y les explicamos el tipo de vida que seguimos y les
pedimos respeto por nuestra forma de querer vivir la vida. La verdad es que nos
fue muy bien y la relación ha mejorado mucho. Creo que ahora nos conocemos un
poquito más y les es más fácil aceptar y respetar esas diferencias.
Aquí os dejo este video de un dialogo entre Naomi Aldort y un padre preocupado e inseguro. Naomi me encanta y, personalmente, leerla me ha ayudado mucho.
Aquí os dejo esta interesantísima página de Naomi Aldort con montones de preguntas y respuestas sobre unschooling y crianza respetuosa en general.
Aquí su fantastico libro: