No menciono la pregunta ni la madre para guardar su privacidad.
"Gracias por tu sinceridad. Me alegra que este espacio sea tan intimo y personal como para que puedan salir nuestras sombras también. Es un regalo! Nuestra intención y voluntad (mía y de Maria José) es poder ayudar y dar apoyo emocional, precisamente en estas situaciones...
Primero que todo deciros que lo más importante es que somos conscientes de "eso" que hacemos y que la forma en que lo hacemos no nos gusta y queremos mejorarla o incluso cambiarla... El verlo, sentirlo, reconocerlo es el primer y más importante paso... Yo hace más de 20 años, un día me levanté y tome la decisión más importante de mi vida: QUIERO SER MEJOR PERSONA! Por mi infancia y lo vivido tenía muchos automáticos y mucha necesidad de control... No soy terapeuta y asesora por casualidad... je je je. Empece mi GRAN indagación por mi y luego tuve la necesidad de compartir, dar y ayudar a los demás... No me lo podía quedar sólo para mí...
Primero que todo es esencial saber que "eso" que estamos sintiendo de no es sólo de ahora sino que viene de atrás (hay emociones reprimidas que se actualizan en el presente cuando conectamos con vivencias emocionales internas parecidas). No es la situación en sí... sino lo que la situación nos hace sentir... No son los hechos exactamente, son las emociones que emergen de eso que está pasando... Siempre es CÓMO lo gestionamos y no lo QUÉ realmente está pasando...
Hay que comprender que no somos lo que hacemos y decimos. Nuestras reacciones automáticas son el reflejo de vivencias pasadas. Ya sé que insisto mucho en lo reprimido y no expresado pero es que hay que tenerlo muy presente. Si solo miramos lo que pasa ahora no podremos entender el por qué nos pasa y sino entendemos el por qué nos pasa no podremos cambiarlo...
Cuando tenemos la necesidad de control es por la seguridad que nos da. Cuando no tenemos el control de algo nos sentimos perdidas, solas, desamparadas y tenemos miedo... Controlar es nuestro mecanismo de defensa para sentir seguridad...
Ok, vemos a lo practico! En el caso del coche que comenta (dicha madre)... Hay que tener siempre en mente eso de: Primero anteponer la relación y luego todo lo demás y también eso de: Esto que voy a decir y hacer nos conectará o distanciará...
La energía con que nos comunicamos, el tono de voz, los gestos... hace que nuestros hijos se sientan de un modo u otro y ese modo de sentirse es lo que va a determinar su colaboración ... Si paramos el coche cuando ya estamos a punto de explotar no va a ser de mucha ayuda... Es importante parar el coche para poder hablar y explicarles que cuando estén preparados te avisen y que mientras tanto tu les esperas... Que la actitud sea pacifica no de estrés y prisas... Los niños son SUPER susceptibles a cómo les tratamos...
Cada vez que uno de mis 3 hijos tiene algún comportamiento no armonioso (molesta, grita, se enfada, no colabora...). Me paro y miro como estoy yo. Cómo me siento? Qué estoy pensando? (nuestra mente emite juicios continuamente y piensa cosas que nos alejan...). Me pregunto cómo me sentiría sin ese pensamiento?... Solo podemos experimentar paz si sentimos paz y para ello debemos tener pensamientos pacíficos...
Chicas! No son ellos, somos nosotras... Cuando cambiamos nuestra forma de mirar a las personas, las personas cambian. No es que cambien de actitud sino que lo que cambia es nuestra forma de verlo y sentirlo..."
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